Menú participante:
Agregar aguardiente al café era una práctica tradicional de algunos caficultores, utilizada tanto para combatir el frío en las montañas como para reflejar su identidad cultural. Esta bebida, con su carácter robusto, se convirtió en un símbolo de tradición y un elemento importante en celebraciones, enriqueciendo el perfil de sabor del café con un toque distintivo.
Inspirados por esta tradición, buscamos replicar la esencia y el sabor únicos de la bebida sin necesidad de incorporar licor. Para ello, utilizamos anís y clavo como acompañantes, ingredientes que aportan notas especiadas y cálidas, evocando los sabores auténticos de la preparación original. Estas especias no solo realzan el café, sino que también respetan y honran la herencia cultural, mientras ofrecen una alternativa creativa y accesible para todos.
Cafés